Los religiosos de la Orden de los Canónigos Regulares Premonstratenses de la Abadía de San Norberto, conocidos como Padres Norbertinos, deciden iniciar una obra misionera en Perú y se establecen en la Urbanización Santa Catalina, en el distrito de La Victoria.
Los Padres Norbertinos acuerdan la creación de una escuela parroquial e invitan a las religiosas de la Congregación del Sagrado Corazón para que se encarguen de su dirección.
En 1964, la escuela empieza a funcionar en la calle Max Gonzales Olaechea 390, bajo la dirección de la Madre Elena Rita Mc. Carthy.
En 1965, el Padre Miguel E. Lepp O.Praem, párroco de la Parroquia San Norberto, gestiona la donación de un terreno. La Compañía Urbanizadora Santa Catalina acuerda donar el terreno a los Padres Norbertinos, que actualmente ocupa el nivel secundario. La construcción avanza y, el 15 de mayo, el alumnado se traslada a su nuevo local.
En 1968, el Padre Ricardo Mulroy, párroco, gestiona la donación de la manzana de terreno que actualmente ocupa el nivel primario, inicial y losas deportivas.
En 1975, egresa la primera promoción del colegio.
En 1994, los Padres Norbertinos asumen nuevas obras que les impiden continuar en la Parroquia San Norberto. El Arzobispo de Lima encarga a los sacerdotes diocesanos la administración parroquial.
A lo largo de estos casi 60 años, el colegio ha experimentado un crecimiento y desarrollo tanto académico, con nuevos convenios y alianzas, como en infraestructura, con ampliaciones en patios y aulas, así como la implementación de laboratorios, cafeterías, bibliotecas y juegos infantiles, entre otros.